¿Cómo puede ABA ayudar?
El análisis de comportamiento aplicado (ABA, por sus siglas en inglés) puede ayudar a su hijo con autismo a través de su capacidad innata para aprender, con la ayuda de un programa educativo de buena calidad. La cantidad que un niño puede aprender cuando se le da el mejor programa posible es algo que nadie puede predecir concretamente. Sin embargo, la calidad del programa es algo en lo que se puede influir. La cantidad de horas por semana es importante porque más horas significa más aprendizaje. Si su hijo aún no es capaz de iniciar una actividad adecuada, cada hora dedicada al aprendizaje es una hora menos dedicada a la práctica de actividades no deseadas. ABA proporciona tiempo más productivo y de calidad.
La calidad de la instrucción es igual de importante. La idea de proporcionar un refuerzo positivo parece bastante simple. Sin embargo, rara vez es suficiente simplemente darle a un niño un dulce cada vez que da una respuesta correcta. Hay muchos, muchos detalles y estrategias que un buen maestro de ABA debe dominar para que su hijo avance en el plan de estudios lo más rápido posible.
Puede y debe esperar que su hijo aprenda a su máximo potencial, aunque no hay manera de estar seguro exactamente cuál es ese potencial.
La investigación demuestra que algunos niños se recuperan por completo, y la mayoría de los demás pueden hacer un progreso muy sustancial. Si bien nadie puede decirle si eso es posible para su hijo, él merece la misma calidad de instrucción y la misma oportunidad de lograr una vida normal que los muchos niños que se han recuperado por completo.
Espere también que el progreso sea algo que debe considerar a largo plazo. Tres pasos adelante y dos atrás es más la regla que la excepción. Los estancamientos diarios o semanales, los arranques y la regresión pueden ser emocionalmente agotadores. Sin embargo, un programa de alta calidad debe conducir a un progreso medible de mes a mes.
ABA es un programa bien desarrollado para maximizar el aprendizaje. Los terapeutas de ABA están trabajando para maximizar la enseñanza individual que provoque el aprendizaje más eficiente y duradero.
A medida que continúa un programa ABA, si tiene éxito (como lo es aproximadamente el 90% del tiempo), el cerebro del estudiante cambia: él / ella “aprende a aprender” como sus compañeros de desarrollo típico.